Hay quienes consideran que el compliance penal tiene sus limitaciones, y algunas críticas comunes son:
Formalismo excesivo: A veces, los programas de compliance se convierten en una mera formalidad para cumplir con la ley, sin que realmente permeen en la cultura corporativa.
Coste y carga administrativa: Implementar un sistema robusto de compliance penal puede ser costoso y generar una carga administrativa significativa, especialmente para empresas pequeñas y medianas.
Ineficacia en algunos casos: Cuando no hay un verdadero compromiso por parte de la alta dirección, el compliance puede ser ineficaz para prevenir conductas delictivas.
Sin embargo, hay otro lado del argumento. Cuando se implementa correctamente, el compliance penal puede fomentar una cultura ética en la empresa, proteger su reputación y minimizar riesgos penales. Todo depende del enfoque y del compromiso real de las organizaciones.
Es cierto que muchos empresarios perciben el compliance penal como un gasto obligatorio y no como una inversión. Esto puede deberse a una falta de comprensión sobre los beneficios a largo plazo o simplemente porque su implementación no se traduce en resultados visibles inmediatos. Si el enfoque se limita solo a evitar multas o sanciones, es fácil que lo vean como un trámite burocrático.
Sin embargo, en un mercado donde la reputación puede marcar la diferencia, el compliance bien integrado puede proteger a una empresa de riesgos, mejorar su imagen y generar confianza entre socios, empleados y clientes. Quizás el desafío está en cambiar esta percepción y demostrar que no solo evita problemas, sino que también puede impulsar oportunidades.
Para que el compliance sea percibido como una inversión y no como un gasto, es fundamental cambiar la narrativa en torno a sus beneficios. Aquí hay algunas ideas clave que pueden ayudar:
Conectar el compliance con la reputación empresarial: Una empresa que prioriza la ética y el cumplimiento legal tiende a ganar mayor confianza de clientes, socios y empleados. Esta confianza puede traducirse en oportunidades comerciales y fidelización.
Destacar la prevención de riesgos: El compliance actúa como un seguro contra posibles multas, demandas y daños reputacionales. Mostrar ejemplos concretos de empresas que evitaron desastres financieros o legales gracias a sus sistemas de compliance puede ser muy persuasivo.
Promoverlo como ventaja competitiva: Hoy en día, muchos mercados premian la transparencia y la responsabilidad corporativa. Las empresas que integran el compliance en su cultura tienen más posibilidades de diferenciarse y atraer inversiones.
Integración estratégica: Cuando el compliance se alinea con los objetivos empresariales, como sostenibilidad o innovación, deja de ser una carga y se convierte en un motor que impulsa el crecimiento.
Medición de impacto: Implementar métricas claras para evaluar cómo el compliance genera valor (por ejemplo, reducción de riesgos, mejora de imagen, incremento en la confianza) puede ayudar a demostrar su impacto tangible.
El compliance tiene un impacto significativo en el rendimiento empresarial, tanto en términos tangibles como intangibles. Aquí te dejo un desglose de los principales efectos:
Reducción de riesgos y costes legales: Al establecer sistemas efectivos de cumplimiento normativo, las empresas pueden evitar multas, sanciones y litigios, lo cual se traduce en ahorros financieros directos.
Mejora de la reputación y confianza: Las empresas que cumplen con las normativas y promueven una cultura ética tienden a ser vistas como más confiables por clientes, inversores y socios, lo que puede abrir puertas a nuevas oportunidades de negocio.
Incremento en la lealtad del cliente y atracción de talento: La transparencia y los valores éticos pueden fidelizar a los clientes actuales y atraer talento que busque trabajar en empresas comprometidas con prácticas responsables.
Eficiencia operativa: A través de procedimientos claros y formación continua, el compliance puede optimizar procesos internos, minimizar errores y mejorar la toma de decisiones.
Acceso a mercados internacionales: Cumplir con normativas globales facilita la entrada a mercados extranjeros, brindando a las empresas un alcance más amplio.
En resumen, el compliance no solo protege a las empresas de problemas legales, sino que también puede ser una herramienta para potenciar su competitividad y sostenibilidad en el mercado.
Si necesita asesoramiento para cualquier asunto relacionado con la responsabilidad penal de las personas jurídicas, no dude en consultarnos #escudolegal